30/4/09

Who's that girl? O... todo lo que nunca quisiste saber sobre Silvia Attwood, porque ni sabías que existía.

Desde hace un tiempo aparecen, sin mucha repercusión, declaraciones que acusan a la subdirectora del CPC del Mercado de la Ciudad (Mercado Norte) de ser una espía de Carlos “Tucán” Yanicelli, cabecilla del Departamento de Informaciones de la Policía (D2) durante la década del '70. El ex-policía Luis Urquiza, víctima de la última dictadura argentina, sostiene que Silvia Raquel Attwood se infiltró en su vida "...para sacarle información sobre los juicios contra la D2", en los cuales él es testigo. Ricardo Orlando, funcionario de la Secretaría de Derechos Humanos de la Provincia, declaró ante la fiscal Graciela López de Filoñuk que cinco personas le contaron que vieron a Attwood con Yanicelli. Hasta el momento rige secreto de sumario y, para el público general, la acusación no deja de ser vaga.

Silvia Raquel Attwood, acompañante terapéutica devenida en funcionaria pública de los ciudadanos de Córdoba, encuentra rítmicamente lugar en el ojo de la tormenta. Bueno, de la llovizna. Su desempeño como artista visual, performer y escritora ha encontrado graves ecos entre las dos o tres personas que están al corriente de su existencia. Particularmente llamativa es su constante mención en el blog Los Crucificados, espacio creado por estudiantes del departamento de Música de la Escuela de Artes de la Facultad de Filosofía y Humanidades. En un comienzo, estos jóvenes cuestionaron sólo su historial como artista, la ocupación de espacios para los cuales no recibió formación académica y algunos tópicos relacionados a su vida privada. En el último post se hace referencia directa a las duras acusaciones efectuadas por Luis Urquiza (click aquí para fuente directa).

La acusada se defendió alegando que durante la última dictadura contaba con sólo 8 o 9 años, a pesar de tener la apariencia de una mujer mucho mayor. Sin embargo, las denuncias hablan de su actividad con la Fuerza Republicana y un amorío con el guardaespaldas de Ricardo Bussi en Tucumán, entre septiembre y noviembre del año 2005. En aquella ciudad supuestamente se la conocía como "Raquel" y ella misma se presentaba como directora de teatro y de cine en busca de sobrevivientes de la dictadura militar para realizar una película. Silvia Raquel Attwood, que no dirige teatro ni cine, supo usar en defensa propia durante sus declaraciones públicas la cantidad de obras performáticas que realizó en contra del Proceso a cuya estela se la vincula. Para muchas personas, todas esas obras se caracterizaron por una extrema pobreza, tanto en su contenido conceptual como en su desarrollo plástico.
Si fuera así...

Cómo se explica que una artista sin educación formal validable, que llegó a ocupar un cargo público para el cual hay mucha gente capacitada, haya dedicado el tiempo suficiente a relaciones de cierto olor y tendencia, pero no a la producción acabada de las obras que expone?

Por qué Silvia Raquel Attwood, como artista... es una buena "relaciones públicas"?

Cómo se explica que esto no esté en debate entre los ciudadanos de Córdoba?

La denuncia del señor Luis Urquiza debería haber abierto puertas en la opinión general que aún permanecen cerradas. Nada más y nada menos porque se trata de una representante de todos los ciudadanos; acomodada a dedo, como corresponde. Por ese motivo la sociedad cordobesa todavía no se pregunta

quién es Silvia Raquel Attwood?

Pero debería. Si es inocente, porque es inocente; si es culpable, porque es culpable.


LA OTRA CAMPANA. Su abogado, Luis Reinaudi, aclaró para Día a Día lo siguiente: "Fuimos a Tribunales a ponernos a disposición de la fiscal, ya que mi clienta no tiene que defenderse de nada, porque no hay ninguna acusación por parte de la Justicia en contra de ella. Como la causa está con secreto de sumario, ni siquiera pudimos conocer el alcance de la denuncia."
Todavía no se formalizó en la justicia la grave acusación de Luis Urquiza? Qué peso tiene si no sigue las vías oficiales disponibles en democracia? Puede verse afectada la imagen pública de la acusada, aún cuando las denuncias no tengan verdaderas repercusiones legales?

Respuesta de Silvia Raquel Attwood en el diario Día a Día puede encontrarse en el siguiente link:
Todo es una calumnia


Fotografía perteneciente a la instalación "Processus", de Silvia Raquel Attwood, presentada en el marco del Día Nacional de los Derechos Humanos en la Biblioteca Córdoba.

Las últimas producciones visuales de la artista son expuestas por la misma autora en los siguientes blogs de acceso público:

Hibridocongenito
Porfo-mov

Una reseña de los escritos publicados por la escritora puede encontrarse en este otro blog, también de su autoría:
literariofields